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Los cazas "Yak" en la Gran Guerra Patriotica

 

Yak-7B M-105PF

 

[TsAMO, f. NII VVS, op. 485655, d. 11, 111 i 113]

 

El Yak-7B con el motor potenciado M-105PF era un caza de aviación frontal y se diferenciaba de su antecesor Yak-7B M-105PA principalmente por la potencia de su motor, la cual aumentó de 1.050 a 1.180cv. El incremento de la potencia a nivel de suelo y a altitudes medias se logró mediante el ajuste del regulador automático de supercompresión R-7 subiendo la presión de 910 a 1.050 mmHg.

 

Para garantizar el funcionamiento estable en régimen potenciado, se reforzaron los dedos de los pistones y se modificó el reglaje de los carburadores. Básicamente no había otras modificaciones de diseño que diferenciaban el M-105PF del M-105PA (para mayor información, ver la anterior parte, denominada “Yak-1 M-105PF”).

 

La iniciativa de potenciar el motor M-105PA (aumentando la supercompresión) provenía del OKB de A.S. Yákovlev, el cual a comienzos de 1942 con el avión de serie Yak-7A ¹22-11 realizó una serie de experimentos, incrementando la presión de forma sucesiva: hasta 950, luego hasta 1.000 y finalmente hasta 1.050 mm Hg. Dichos experimentos también tenían por objetivo determinar en pleno vuelo la influencia ejercida por este incremento de presión sobre la velocidad máxima y otras características de vuelo, encontrando el óptimo.

 

Los resultados de estos experimentos resultaron muy prometedores y sirvieron de base para tomar la resolución gubernamental, encargando a V.Y. Klímov en el plazo muy breve efectuar el reajuste del motor M-105PA del régimen de trabajo normal al régimen potenciado.

 

Aparte de instalar esta nueva versión del motor en el Yak-7B (a partir de la serie ¹22), se llevaron a cabo una serie de trabajos para mejorar la aerodinámica y reducir la masa de vuelo del avión, principalmente rediseñando y aligerando elementos de la estructura sin reducir sus coeficientes de resistencia y sin perjuicio de las cualidades de vuelo y combativas del avión.

 

Las principales modificaciones fueron las siguientes:

 

- aligerada la carcasa del fuselaje;

 

- simplificado y aligerado el mecanismo de elevación del asiento del piloto (el asiento solamente podía ser ajustado en tierra);

 

- instalado un nuevo respaldo del asiento, más ligero y de tipo suave;

 

- el plexiglás de la cubierta de la cabina trasera (la cubierta deslizable fue sustituida antes por una puerta que se abría a estribor, ver “Yak-7A M-105PA”) fue sustituido por contrachapado;

 

- retirados los cierres para enganchar el avión en tierra;

 

- en el ala se aligeró la carcasa y el recubrimiento de los pozos para las ruedas;

 

- estructura del fuselaje totalmente rediseñada;

 

- aligerado el tren de aterrizaje (retiradas las anillas para remolcar el avión, instalados nuevos vasos superiores y nuevos semiejes);

 

- fueron retiradas las lanzaderas de cohetes y su sistema eléctrico;

 

- debido a la potenciación del motor, en el eje de la hélice fue incorporada una anilla reguladora de revoluciones adicional. Como resultado, el ángulo de fijación de las palas de la hélice (a pequeño paso) fue incrementado de 20 a 23º;

 

- retirado el sistema de recarga neumática del cañón.

 

En cuanto al armamento, no había diferencias con el Yak-7B M-105PA.

 

En cuanto a los equipos especiales, la única diferencia consistía en que la cabina del piloto cumplía plenamente las exigencias de la VVS para una caza con cabina estándar. En el informe sobre las pruebas estatales del Yak-7B M-105PF constaba, que “tanto por su diversidad y distribución, como por la calidad de montaje, el equipo especial del Yak-7B se encuentra entre los primeros puestos de la lista de aviones análogos, tanto soviéticos como enemigos” [TsAMO, f. NII VVS, op. 485655, d. 113, l. 15].

 

Como resultado de las modificaciones, mencionadas anteriormente y otras menos importantes, las características del avión variaron de manera siguiente:

 

- la masa de vuelo se redujo aproximadamente en 30kg;

 

- la carga alar específica se redujo de 177 a 175,5kg/m2;

 

- la carga especifica por unidad de potencia se redujo de 3,0 a 2,55kg/cv;

 

- la velocidad máxima a nivel de suelo se incrementó en 14km/h (hasta 514km/h);

 

- la velocidad máxima en la segunda frontera de altitud (3.650m) se redujo en 10km/h (hasta 570km/h) debido a la reducción de la cota de altitud del motor de 4.000 a 2.700m. Por encima de la segunda frontera de altitud, las características de vuelo del Yak-7B con el motor M-105PA y M-105PF coincidían (las potencias entregadas por ambos motores a esta altitud eran las mismas);

 

- el tiempo de ascenso hasta 5.000m se redujo de 6,5 a 5,8 minutos;

 

- mejoraron las características de pilotaje y la maniobrabilidad en las figuras horizontales y verticales;

 

- el tiempo de viraje a 1.000m de altitud se redujo en 1-2 segundos;

 

- la ganancia de altitud en un giro de combate a altitud inicial de 1.000m se incrementó en 100m.

 

El alcance del Yak-7 con M-105PF a velocidades cercanas a las máximas, se redujo. Por ejemplo, a una velocidad de 0.9Vmax y en la segunda frontera de altitud, el alcance se redujo de 700 a 645km. Pero en regimenes de trabajo equivalentes (el M-105PF funcionando en las mismas condiciones que el M-105PA) el alcance prácticamente no ha variado.

 

En los Yak-7B M-105PF se cambió el rango de centrados de explotación, siendo entre 15,2-19,0% de la cuerda media aerodinámica. Esto se debió a la eliminación del depósito adicional en la cabina trasera.

 

El desplazamiento del centrado hacia delante hizo aumentar la estabilidad longitudinal, pero hizo disminuir el rendimiento del timón de profundidad durante aterrizajes “sobre tres puntos” (ángulo de aterrizaje de 27º en vez de 30º) y así mismo redujo el ángulo anticapotaje hasta 22º10´ - 26º20´ (frente al mínimo permitido de 26º30´). Esto último fue un serio inconveniente, dado que impedía probar el motor en tierra sin necesidad de aguantar la cola del avión para que no se levante; además, en mayor medida reducía las posibilidades de usar los frenos (a tope y de forma prolongada) para reducir la distancia de aterrizaje. Por esto la distancia de aterrizaje ascendió a 620m (bastante elevada).

 

Para solucionar los puntos débiles mencionados, el centro de gravedad tenia que ser desplazado hacia atrás un 3-4% de la cuerda media aerodinámica, pero para ello había que redistribuir los sistemas del avión. Pero esto no estaba entre los planes del OKB dado que ya estaba trabajando en la conversión del Yak-7B en el Yak-9: fue allí donde se tenían que buscar soluciones radicales para una mejora definitiva del centro de gravedad del avión.

 

Hubo también otros puntos débiles, por ejemplo:

 

1. Expulsión del aceite por la válvula de purga del motor. El aceite ensuciaba el parabrisas de la cabina, los tubos de escape y otras partes del avión, sobre todo cuando el depósito de aceite se cargaba en exceso y cuando las temperaturas del agua y aceite estaban por encima de 100ºC.

 

2. El intenso régimen de temperaturas del motor M-105PF. En ascenso, con las tapas de los radiadores del agua y aceite completamente abiertas, la temperatura del aceite alcanzaba su limite máximo, y la del agua superaba el limite (a temperatura del aire exterior de +15ºC). Como consecuencia, no se podía aprovechar a pleno rendimiento la potencia nominal del motor (a 2.600rpm) y alcanzar el régimen óptimo de la velocidad ascensional.

 

3. El consumo incompleto y asimétrico del grupo de depósitos de combustible derecho e izquierdo. En el Yak-7B, fabricado en mayo de 1943, este defecto se solucionó incorporando al sistema de combustible una válvula de gasolina de tres posiciones en vez de dos (como en la versión anterior). El piloto alternaba el consumo desde los grupos de depósitos derecho e izquierdo (cambiando la posición de la válvula), haciendo que el consumo de ambos grupos sea uniforme y completo.

 

4. El bajo alcance e insuficiente calidad de comunicación de la radio (en ambos sentidos). Inicialmente el alcance fue el siguiente:

 

- aire y tierra: 50km;

 

- tierra y tierra: 75-80km;

 

- aire y aire: 15-20km.

 

Más adelante los defectos se iban solucionando gracias a:

 

- incorporación de la toma de tierra en el radiotransmisor, conectándolo a “masa” del avión;

 

- mejoras de la calidad de metalización;

 

- el total apantallamiento de la red eléctrica y de equipos eléctricos del avión.

 

El Yak-7B ¹22-41 con el motor potenciado M-105PF pasó las pruebas estatales en el NII VVS desde 30 de mayo hasta 9 de junio de 1942. Fueron realizados 36 vuelos con una duración total de 23 horas.

 

Las pruebas fueron llevadas a cabo por los pilotos de prueba P.Y. Fedrovi (del OKB de A.S. Yákovlev) y A.N. Lázarev (de la fábrica ¹153), ingenieros de pruebas A.T. Stepanets, K.V. Puzanov, A.G. Aronov (del NII VVS), S.D. Evdokímov, P.S. Limar (del LII) y otros.

 

Se obtuvieron las siguientes conclusiones:

 

1. El incremento de la potencia del motor (sin incrementar la masa) gracias al aumento de la supercompresión desde 910 hasta 1.050mmHg tuvo siguientes efectos:

 

a) aumentó la velocidad máxima del Yak-7B en 25-29km/h en un rango de altitudes desde 0 hasta 2.800-2.000m; en 14-18km/h a 3.000m de altitud; en 20-25km/h a 4.000m. A las altitudes superiores a 5.000m la velocidad no había variado;

 

b) se redujo el tiempo de ascenso hasta 5.000m en un 10% (como cifra media);

 

c) aumentó la ganancia de altitud en un giro de combate (a una altitud inicial de 1.000m) en 100m o en un 11% (como cifra media);

 

d) se redujo la distancia de despegue en 50m o en 10-12% (como cifra media);

 

2. El incremento de la supercompresión desde 910 hasta 1.050mmHg provocó un ligero aumento de las temperaturas del agua (hasta 5ºC) y aceite (hasta 12ºC).

 

3. El equipo especial del Yak-7B, por su diversidad y distribución era de los más completos en comparación con los cazas, tanto soviéticos como enemigos.

 

4. La calidad de fabricación y el nivel de perfeccionamiento de los Yak-7B de la serie ¹22 de la fábrica ¹153 mejoró notablemente, pero aun así no se pudo alcanzar el debido nivel, a pesar de que la fábrica ya llegó a producir más de 5-7 grandes series y tuvo suficientes posibilidades para solucionar todos los defectos, propios de la asimilación de la producción de serie [TsAMO, f. NII VVS, op. 485655, d. 113, 82 y 106].

 

En el año 1943 en la fábrica de Novosibirsk fueron llevadas a cabo pruebas de control de 13 aviones Yak-7B M-105PF [TsAMO, f. NII VVS, op. 128661, d. 5, l. 12]. Tras realizarse estas pruebas, se obtuvieron los siguientes datos:

 

1. A lo largo del año 1943 la masa de vuelo de los aviones, como cifra media, se mantuvo sin variaciones (ascendiendo a unos 3.000kg), con desviaciones de 15-16kg. Estas desviaciones dependían de la disponibilidad o falta de los cristales blindados; también dependían de las desviaciones en la tecnología del proceso de producción.

 

2. La velocidad máxima de los aviones de serie a lo largo del periodo de su producción no sufría variaciones importantes y como cifra media era:

 

- a nivel de suelo: 531km/h (+12/-9km/h);

 

- en la 1ª frontera de altitud: 567km/h (+10/-7km/h);

 

- en la 2ª frontera de altitud: 588km/h (+8/-11km/h).

 

Las fluctuaciones de la velocidad máxima se explicaban por una serie de factores. Los más significativos fueron:

 

- diferente calidad de producción de los aviones;

 

- desviaciones de la potencia nominal de los motores, instalados en los aviones, principalmente a causa del diferente ajuste de la presión de supercompresión, y etc.;

 

Las fluctuaciones de la potencia de los motores fueron las siguientes:

 

- a nivel de suelo: 2,5%;

- en la 1ª frontera de altitud: 3,3%;

- en la 2ª frontera de altitud: 3,1%.

 

3. Las fronteras de altitud eran las siguientes:

 

- la 1ª: 1.580m (+300/-330m);

- la 2ª: 3.860m (+300/-450m).

 

Las muy elevadas desviaciones de la media de las fronteras de altitud eran explicadas por el irregular funcionamiento del supercompresor y del RPD (regulador de presión constante).

 

4. El tiempo de ascenso hasta 5.000m de altitud ascendía a 5,7min (+0,6/-0,5min) a 2.600prm, y a 2.700rpm en 0,6 minutos menos.

 

En base al análisis de los datos obtenidos se concluyó que en el año 1943 la fábrica de Novosibirsk cumplió las resoluciones del KGO del 2 de noviembre y de 9 de diciembre de 1942, relativas a las velocidades máximas del Yak-7B con el motor potenciado.

 

En el mismo 1943 se llevaron a cabo pruebas conjuntas (del OKB y del LII) del Yak-7B de la serie ¹31 (¹31-01) con el motor potenciado. Las principales diferencias de este avión fueron las siguientes:

 

- la antena y su mástil fueron retirados dentro del fuselaje;

 

- los bordes de ataque del ala y del estabilizador pulidos al 30% de su cuerda aerodinámica;

 

- instalados los tubos de escape reactivos de dos modelos: 8 unidades del modelo de OKB y 12 del NII VVS. Los tubos fueron cubiertos con los carenados, igual que en el Me-109;

 

- realizada una exhaustiva hermetización del cono de la hélice y de todo el avión (para eliminar las corrientes de aire internas que aumentan la resistencia aerodinámica);

 

- mejorado el ajuste de las piezas que entran en contacto con la corriente del aire;

 

- tomadas medidas para lograr el completo pliegue de la rueda de cola (del tamaño 300x125mm), además, su pozo se cerraba con dos cubiertas;

 

- eliminadas las holguras (espacios) entre los timones, y etc.

 

En el acta del LII del 15 de mayo de 1943 [TsAMO, f. 35, op. 11287, d.1933] constaba lo siguiente:

 

1. El caza Yak-7B ¹31-01 con el motor potenciado, como resultado de las medidas indicadas, tomadas para mejorar su aerodinámica, alcanza una velocidad máxima mucho mayor en comparación con los aviones de serie, en concreto:

 

- a nivel de suelo: 547km/h;

- a 4.000m de altitud: 612km/h;

 

Estas velocidades fueron record para los aviones Yak-7B. Es evidente que un avión de serie cualquiera no era capaz de alcanzar tales características.

 

2. El tiempo de ascenso hasta 5.000m de altitud se redujo en 0,3 minutos.

 

3. La instalación de los tubos de escape, recomendados por el NII VVS, en vez de los tubos del OKB, instalados en los aviones de serie, aumentaba la velocidad máxima en 8km/h.

 

4. La ubicación del mástil y de la antena dentro del fuselaje no fue una medida justificada, dado que el alcance de la radio (con calidad de comunicación satisfactoria) se redujo aproximadamente a la mitad, alcanzando solamente 45-50km. Debido a eso, se tuvo que renunciar la ubicación interna de la antena y de su mástil, lo que obviamente causó cierta reducción de la velocidad máxima.

 

Estas medidas, tomadas para mejorar la aerodinámica del Yak-7B M-105PF le garantizaron una ventaja frente al Me-109G2 (de tres armas) a nivel de suelo en 23km/h y a 1.000m de altitud en 16km/h. A 5.000m de altitud el Me-109G2 superaba al Yak-7B M-105PF en 23km/h. Por encima de los 5.000 la ventaja en velocidad del Me-109G2 era aun más notable y ascendía a 80km/h.

 

El Yak-7B M-105PF se producía en serie en dos fábricas: en la ¹153 de Novosibirsk, desde agosto de 1942 (a partir de la serie ¹22) hasta diciembre de 1943 (hasta la serie ¹50), y en la fábrica de Moscú ¹82, desde mayo de 1942 (a partir de la serie ¹1) hasta julio de 1944 (hasta la serie ¹28). Los aviones de la fábrica ¹82 tenían una masa de vuelo superior en 25-30kg, mientras su velocidad máxima era inferior en 15km/h, en comparación con los aviones de la fábrica ¹153.

 

En total fueron producidos 5.120 aviones Yak-7B M-105PF. Por primera vez participaron en combates en agosto de 1942, en la zona de Stalingrado.

 

La brigada del OKB de A.S. Yákovlev realizó directamente en el frente una serie de medidas para mejorar la visibilidad trasera de la cabina del Yak-7B M-105PF: fue “recortada” la joroba detrás de la cabina, y su cubierta recibió la forma de “lágrima”. Desde 17 de noviembre hasta 13 de diciembre de 1942, en el Frente Noroccidental, en el 24ºIAP (bajo mando de F.I. Shinkarenko) de la 240ªIAD del 6ºVA se llevaron a cabo las pruebas de ejercito para probar el caza en combates reales.

 

Los resultados de estas pruebas fueron los siguientes: se realizaron 242 vuelos de combate (en total sumando todos los aviones), y en 6 combates aéreos fueron derribados 4 aviones enemigos (2 Me-109F, 1 He-126 y 1 FW-189). Los pilotos soviéticos perdieron 1 Yak-7B.

 

La cabina con la visibilidad mejorada recibió una valoración positiva por parte de los pilotos y fue recomendada para ser instalada en todos los cazas [TsAMO, f. 35. op. 11287, d. 1452].

 

Los cazas Yak-7B M-105PF, destinados para formar parte del sistema de PVO, adicionalmente se dotaban de la radiobrújula RPK-10, de un faro de aterrizaje FS-155 (instalado en la consola alar izquierda) y de indicación luminosa de la posición plegada del tren de aterrizaje.

 

Del Yak-7B MPVO se producía uno cada 10, uno cada 100 aviones o en series de 5-10 unidades. Al sistema PVO se le suministraban mensualmente 20 aviones Yak-7B.

 

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